Por qué deberíamos hacer huelga (Comité de Anabel Segura)

Reproducimos el comunicado que el Comité de Anabel Segura ha distribuido en su centro.

Por qué deberíamos hacer huelga

Los nuevos gestores de Indra no han venido para hacer amigos, ni siquiera para quedarse. [1]

Tras el primer ERE vendrán otros y, con toda probabilidad, bajadas de sueldo y pérdida de condiciones en los contratos.

Asusta tener a todo un gobierno detrás de una operación para quitarle a Indra su parte más rentable, Defensa, y abandonar de nuevo el barco a continuación para dejarnos en manos de oscuros Capitales.

Es posible, incluso, que la “veranosidad” y las prisas no se deban sino al temor de que un ERE propiciado por el gobierno sobre una empresa -resultado de la unión, entre otras, de muchas empresas públicas pagadas con nuestros impuestos- estallase en plena campaña electoral junto a los mensajes de recuperación y optimismo infundado.

Basta un vistazo a los colectivos que van a ser despedidos de inmediato para darse cuenta que después del primer ERE, Indra ya no volverá a ser la misma. Se va a despedir al equivalente a diez veces los desasignados actuales. Unos 1500 de los despidos se ceban en centros que suman apenas 8000 trabajadores: uno de cada cinco de tus compañeros (o tú mismo) desaparecemos.

¿Qué estructura queda en la empresa tras eso? ¿Cuántos proyectos desaparecen? ¿Qué futuro aguarda a los que se queden y por cuánto tiempo?

Resulta descorazonador, pero aunque nos traten de convencer de que todo está perdido, que no se puede hacer nada, o que no se puede parar ni el ERE ni lo que venga, no es así.

Indra tiene una presencia importante en las grandes empresas españolas y mundiales, así como en las administraciones. Una huelga nuestra tendría una gran repercusión, no solo mediática, sino que los propios clientes serían conscientes de que nuestro trabajo para con ellos se termina. Que lo malo no va a ser si tú o tus compañeros ya no estáis después del verano, sino que si “el plan” sigue adelante, en poco tiempo Indra dejará de existir como tal y todos sus profesionales, su talento y su experiencia se perderían entre otras empresas y las inmensas colas del paro, entonces mucho mayores, pero en ningún caso podrían volver a aprovechar nuestro conocimiento de su negocio porque ya no estaríamos con ellos.

Toda la historia está repleta de logros y derechos de los trabajadores conseguidos con huelgas, incluyendo los que poco a poco vamos perdiendo por no defendernos. Porque, te digan lo que te digan, la única huelga que no sirve para nada es la que no se hace.

En Barcelona ya han convocado y nos invitan a que lo hagamos desde todos los centros.