El jueves pasado finalizó la votación sobre el preacuerdo de absorción de la antigüedad. Hemos observado algunas incidencias muy preocupantes que ponen en duda todo el proceso.
Según los resultados enviados por los 4 sindicatos organizadores, el SÍ ha ganado por 15 votos al NO entre 3.390 votos correctamente emitidos.
Con el objetivo de velar por la trasparencia del proceso, CO.BAS e INTERSINDICAL solicitamos el pasado miércoles acceso a la verificación de los resultados, sin haber obtenido respuesta a día de hoy por parte de los sindicatos organizadores del referéndum.
Algunas de las circunstancias sorprendentes que nos gustaría esclarecer son las siguientes:
- El censo:
Tenemos constancia de que los grados E de Capgemini han podido votar, mientras los grados F de este mismo colectivo, y demás personas de otros colectivos no afectados no han podido.
Nos parece muy grave la decisión de incluir los grados E en la votación, ya que en el preacuerdo se especifica que estos grados no están afectados por el preacuerdo: “quedan excluidos de la aplicación de este acuerdo los empleados pertenecientes a los Grados E y F, respecto de los que operará plenamente el mecanismo de la compensación y absorción salarial.”
¿Por qué los grados E sí han podido votar y otros colectivos no afectados, no?
Esta elección del censo no responde a ninguna justificación por su afectación, y parece dirigida a incluir a un censo más favorable al acuerdo. Se trata de 179 personas con cargos de responsabilidad en la empresa que, sin estar afectados, han decantado la votación.
- La participación:
Se afirma que ha sido de un 75.48% del censo de posibles votantes, habiendo participado 3.861 empleados, si bien habría que descontar 471 personas, un 12.20% de votos que no llegaron a emitirse, por lo que la participación real fue del 66.27%.
Si realmente se trata de personas que por problemas técnicos o de cualquier otra índole no hubiera podido votar, supondría un perjuicio para un porcentaje bastante numeroso de la plantilla.
- Las presiones de la empresa a los trabajadores:
Nos parece de una gravedad enorme, que al final del primer día de votación, se activara una campaña de la empresa, con reuniones urgentes de responsables de grupos, para que éstos incitaran a votar SI al preacuerdo, con presiones y coacciones, tal como nos han comunicado varios trabajadores.
Nos sorprende que la empresa activara estas presiones en pleno proceso de votación, como si tuviera conocimiento de que los resultados parciales eran en sentido contrario a lo que esperaban. La herramienta utilizada para la votación permite saber resultados parciales en cualquier momento.
Debido a todas las irregularidades denunciadas anteriormente, consideramos que la plantilla NO ha avalado el preacuerdo firmado por CCOO, CSIF, SAITIC-SAIF, UGT y APT.
Instamos a empresa y resto de sindicatos a abandonar este mal acuerdo y sentarse de nuevo a trabajar para una nueva política retributiva que permita mínimamente el mantenimiento del poder adquisitivo de la plantilla de Capgemini.
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