La lucha contra las privatizaciones debe continuar. El ayuntamiento continúa con la privatización sin apenas oposición sindical

Mientras que los dirigentes de los sindicatos subvencionados luchan con uñas y dientes en la Mesa General por mantener los privilegios ganados por los servicios prestados (más subvenciones y liberados), la Corporación continúa con el desmantelamiento del sector público, privatizando instalaciones y servicios. Si bien es cierto que la mayoría de los afiliados a estos sindicatos está posicionada contra las privatizaciones, la realidad es que muy poco pueden hacer dentro de las estructuras burocráticas que rigen en esas organizaciones. Por su parte, estos dirigentes, más preocupados por sus dietas y liberaciones, tienen la cabeza en otro sitio, dando por perdida la batalla contra la privatización del sector público, y limitándose a salvar su posición dentro de la estructura del sindicato.

Deportes en el punto de mira. Bajo el eufemismo de “colaboración público-privada”, se esconde la venta a precio de saldo del sector público. En el caso de Deportes, la proliferación de empresas privadas y federaciones en los centros deportivos es ya un escándalo. Mientras que la privada va ocupando cada vez más espacios, miles de interinos ven peligrar su trabajo. Pero no es sólo un problema de los y las interinas, como algunos quieren hacernos ver. El proceso de destrucción de empleo público nos acaba afectando a todos. De momento ya están preparando el camino a la privatización del verano. Ya bajo el mandato de Carmena (asesorada por los mismos altos funcionarios), se valoró la privatización del trabajo en verano. Al personal de verano se le separa del resto de plantilla municipal, dejándolos, en el mejor de los casos, como laborales; a su vez funcionarizarían a una pequeña parte del personal fijo antiguo, y sacarían nuevas plazas reconvertidas. Un plan perfecto pactado con los actuales dirigentes sindicales, colaboradores necesarios.

Todo este proceso sería inviable sin la participación de sindicatos y directores. Bien por ignorancia o por desánimo, la acción de estos agentes está siendo decisiva. Por un lado, los acuerdos sindicales sirven de alfombra roja a los postulados de la derecha, y por otro, la acción de Directores promoviendo y permitiendo la participación de Clubs privados y Federaciones. Ya denunciamos en su momento que la modificación del acceso a plazas de director supondría una sumisión de estos a los políticos de turno, cambiando los criterios de independencia, profesionalidad y calidad, por la aceptación de las directrices políticas, (sean las que sean). La mayoría de las veces sin necesidad de orden directa. Para eso están colocados a dedo. Irónicamente, muchos de estos colaboradores, con la boca pequeña, se posicionan en contra de las privatizaciones y por la defensa del servicio público, incluso los vemos en alguna manifestación, pero son los actos y no las palabras los que determinan la posición. Los que estamos a favor de lo público, sindicatos, trabajadores/as, ciudadanos/as…, tenemos la obligación de defendernos contra la privatización, y para ello el único camino es organizar y coordinar la lucha en defensa de lo público, ya sea la Sanidad, la Cultura, el Deporte, los Servicios Sociales…