En el ya lejano 2016, Atos decidió cerrar el centro de trabajo de León, y a las personas adscritas a dicho centro solo les quedaron tres opciones: trasladarse a Madrid, quien quiso y pudo, irse a la calle con una indemnización de 20 días por año trabajado o, lo que hizo la mayoría, quedar adscrito al centro de trabajo de Valladolid, pero seguir trabajando en León con un 100% de teletrabajo.
Como siempre, Atos hizo este movimiento de mala manera, engañando a la plantilla y a toda prisa para evitar que nadie pudiera reaccionar. Algo parecido a lo que intento no hace tanto con el centro de trabajo de Vigo, en el que, gracias a la acción de la plantilla de dicho centro, se evitó el cierre.
A las personas que aceptaron continuar en León con un teletrabajo del 100% la empresa les firmó un contrato de teletrabajo que no tenia ningún tipo de blindaje y que Atos podía cancelar en cualquier momento.
No vamos a decir que la empresa lo haya hecho, nos consta que a nadie se le ha quitado dicho teletrabajo, pero, sabiendo cómo funciona la dirección de Atos, no nos extrañaría nada que lo llegaran a hacer.
Pero, no queda ahí todo el problema de León, ya que tras la firma del último acuerdo de teletrabajo en el que se fija el teletrabajo en un 60/40%, salvo casos excepcionales, la dirección de RRHH decidió que este no era un caso excepcional y, desde marzo del 2023, cambió los contratos de la plantilla de León y les puso un contrato de teletrabajo al 60/40%.
En Cobas nos enteramos hace aproximadamente un año de esta situación y, desde entonces hemos estado persiguiendo al responsable de Relaciones Laborales para que solucionen de una vez este problema y regularicen los contratos de estas personas con el teletrabajo al 100%.
Todo han sido excusas y mareos diciendo que tenían que mirarlo, estudiar los casos y muchas excusas más sin sentido en un caso tan claro, algo que no podemos entender salvo por mala fe y ahorrarse cuatro euros para no pagar diecisiete en lugar de once a estas personas, que la empresa está muy mal.
Finalmente, la semana pasada, tras no parar de insistir, las personas de León nos han confirmado que la empresa ha empezado a regularizarles los contratos y están firmando el teletrabajo al 100%. Aunque sigue sin ser una buena solución, ya que sigue estando en manos de la empresa el cancelar este teletrabajo al 100%, al menos estas personas ya no están en la cuerda floja temiendo que en cualquier momento (por ejemplo, si se quedan en el Centro de Capacitación) tengan que desplazarse a Valladolid dos días en semana. Nos parece bastante vergonzoso que se den estas situaciones, pero es la cruda realidad de esta empresa.
No importan los acuerdos, se los intentan saltar en cuanto pueden y, desde luego, las personas de la plantilla solo somos “activos” de los que sacar el máximo provecho hasta que no les sirvamos para nada.
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